La Fortaleza de Alamut

[El Analandés]

¿Un pulpo en el estanque de una Fortaleza en el desierto? ¡Mejor no pregunto como llegó hasta aquí! (¡Otra vez los magos! )

Bueno, estamos en alguna parte de Siria, el clima es mediterráneo, no el desierto arenoso y abrasador. Y el pulpo supongo que lo trajeron de pequeñito en una pecera y ha ido creciendo.


En cuanto a las tiradas reconozco que estoy más perdido que un camello en el Polo Norte. No estoy familiarizado así que esa parte te la dejo completamente a ti.

Sólo las ponía como ejemplo de aplicación de las reglas. Coñe, que los juegos de rol no son tan complicados, y el Basic Roleplaying es un sistema fácil e intuitivo, todo va a base de porcentajes.


Me parece a mi que aquí había una de esas famosas muertes automáticas aguardándonos.

Pues sí, un par, y como me parece una sección de relleno, no nos perdemos nada.

En cuanto a las puertas, como nadie más se pronuncia, pasamos a la siguiente del mismo pasillo.

Como no especificas, iré por la siguente de la lista. El orden da igual, ¿o no?

Resulta curioso, pero hasta ahora no has tenido que usar la espada. Mira que yo pensaba que el arco no te iba a servir de nada una vez en la fortaleza.

[El Analandés]

78 Abres la pequeña puerta baja y pasas al interior. Está muy oscuro y un horrible olor invade el ambiente. Una escalera pendiente desciende a las profundidades de la sala oscura. Vas a:
¿Bajar la escalera? Vete al 106. ¿Cerrar la puerta y salir? Vete al 449. ¿Esperar hasta ver qué sucede? Vete al 182.


Has dicho que tomas precauciones y escuchas antes de seguir adelante, así que la 182


182 Conteniendo el aliento, te mantienes oculto en la sombra, en lo alto de la escalera. Pronto tu mirada logra taladrar las tinieblas. Puedes ver formas vagamente humanas, en gran número, que van y vienen entre lamentos. Algunas están recostadas entre las columnas de la sala, otras yacen sobre el suelo, con la cara en la tierra. Un rumor terrible y sordo sube de la sala, como un gran gemido lanzado al unísono por cientos de gargantas deformadas. ¿Bajarás las escaleras (vete al 106) o cerrarás despacio la puerta y te irás de aquí (vete al 449)?



¿Y ahora qué? Si sales, te queda la puerta con los símbolos mágicos. Puedes volver aquí luego, si lo deseas.

[Dark-kia]

Suenan como zombies. Ese concepto no se conoce en este tiempo, así que puede que sean prisioneros en las mazmorras. (¿Podemos coger una de las antorchas de las paredes? Para iluminar el camino mejor). Seguiría bajando las escaleras con cautela para echar un vistazo (¿Esta puerta si tiene pomo por dentro, ¿verdad? ). Después de ver donde se escondía la coraza, el resto de piezas pueden estar en cualquier sitio, así que habrá que investigar, aunque el sitio no parece muy acogedor.

La puerta de las runas es otra sala relacionada con magos . Busquemos por aquí a ver que encontramos y después vayamos a investigar que demonios protegen esos símbolos. (Ya le estoy temiendo )

[El Analandés]

Suenan como zombies.

Algo parecido

. Seguiría bajando las escaleras con cautela para echar un vistazo



¿Aún no has aprendido la lección que no hay que meterse en sitios estrechos, oscuros y que huelen mal... como el asiento de atrás de un Volskwagen?

La puerta de las runas es otra sala relacionada con magos . Busquemos por aquí a ver que encontramos y después vayamos a investigar que demonios protegen esos símbolos. (Ya le estoy temiendo )

Pese a que creo que cometes un error, no puedo objetar nada, tu paranoia hacia los magos está por desgracia justificada.

[El Analandés]

106 Empiezas a descender las estrechas escaleras, pero los escalones son resbaladizos, como si estuvieran embadurnados con un jarabe espeso, y bajas mucho más deprisa de lo previsto. Un cuerpo blando amortigua la caída. Descubres, con horror, que has caído sobre un gigantesco osario, donde cuerpos en putrefacción se entremezclan en una masa purulenta. Te alejas a toda prisa del macabro descubrimiento, quitándote con el dorso de la mano los restos de cadáver pegados a tus ropas. Tus ojos se acostumbran a la oscuridad ambiente y te das cuenta de que ante ti está un hombre con el rostro y las manos maltratados por la lepra. ¡Has ido a parar a la leprosería de la Fortaleza! Otros leprosos se acercan, entre gemidos. ¿Los atacarás (vete al 74) o intentarás hablar con ellos (vete al 237)?



106 Hombres que casi no conservan la apariencia humana, se arrastran entre gemidos, en medio de la oscuridad...



No se dice en el texto, pero es de lógica que puedas volver a subir las escaleras y salir de aquí a toda prisa... ¡mientras aún estás a tiempo!

[Dark-kia]

Reconozco que esto no me lo esperaba. ¡Joder, pobres desgraciados! . Bastante tienen ya con lo que soportan, seguramente quieran mendigar algo de comida. Nos cubrimos la nariz y la boca y nos mantenemos alejados. No veo correcto atacarlos sin sentido por ahora (se supone que somos un paladín del bien). Les rogamos amablemente que no se acerquen. Somos un extranjero que está perdido en la Fortaleza que ha caído aquí por error y necesitamos encontrar a Hasan Sabbah.
Si vemos que son hostiles mejor salir por piernas de aquí.

[El Analandés]

Desde luego es una sorpresa, los librojuegos no son para niños. Es un puntazo macabro pero realista...¡ y eso que no has visitado la sala de torturas!

La verdad es que el pasado antes de las medicinas era un horror, la lepra, la peste, la viruela...


Muy buena interpretación, te has metido en la piel del personaje, ¿ves como rolear no es tan difícil?

Eso sí, tu compasión es tan grande como tu valor, creo que la mayoría de la gente saldría corriendo en esa situación. Bueno, si pillas el bicho, no te quejes, que ya te avisaron...

Por cierto, la lepra se transmite por contacto, así que no hace falta que te tapes. Sólo tienes que mantener la distancia.

[El Analandés]

237

«¡Atención!», gritas a los leprosos. «¡No quiero haceros daño! ¡Pobres miserables, qué desgracia la vuestra!» Emocionados por tanta amabilidad, los pobres hombres te acompañan hacia donde está su jefe, aconsejándote que no les toques para evitar contagios. Su jefe es un hombre alto y flaco, pero antaño debió de ser un fuerte guerrero. Los harapos de un blasón bordado en su pecho muestran que fue un caballero. Pero no logras divisar su rostro, que se oculta bajo un yelmo de extraordinaria belleza. Reconoces en él una de las piezas de la armadura mágica de la que te habló Abdul Al-Azhred.
El jefe de los leprosos se acerca a ti. «¡Salud, viajero! ¡Eres valiente aventurándote así en el reino de las sombras. Pero te comprendo: antaño yo fui como tú, valeroso caballero. Había emprendido una búsqueda y necesitaba encontrar a Hasan Sabbah. Protegido por este magnífico casco me lancé a través de la Fortaleza. Era joven e intrépido. Pero cometí un error: al entrar en esta habitación, aterrado por el aspecto de estos desgraciados los ataqué y, a través de las heridas, me contagié de su enfermedad. Fue hace mucho tiempo. Desde entonces he permanecido aquí con ellos...»

¿Tienes una poción o un sortilegio de curación? Vete al 651. Si no lo tienes, vete al 97.


Por desgracia no puedes hacer nada por ellos, aunque tuvieras una poción, no bastaría para curarlos a todos

97
«¿Podrías interceder en nuestro favor ante Hasan Sabbah?», te pregunta el jefe de los leprosos con voz débil. «Estoy seguro de que ignora cuál es nuestra suerte. Si le suplicas que nos ayude te estaremos infinitamente agradecidos.» Aceptas de buen grado y, lleno de emoción, te despides de los leprosos. «Toma este yelmo mágico», dice el guerrero antes de que te vayas. Y se quita el yelmo que ocultaba su rostro, mostrando sus rasfos altivos horriblemente deformados por la enfermedad. Disimulas un escalofrío y te juras ayudar, en la medida de lo posible, al gentilhombre generoso. «Te será más útil que a mí, pues hace ya tiempo que yo renuncié a mi búsqueda. ¡Pero si este yelmo puede ayudarte a encontrar a Hasan Sabbah no lamentaré ni un segundo habértelo confiado!» Te despides del jefe de los leprosos, reiterándole tus promesas. Ve al 155.

[El Analandés]

Por lo que se refiere a la armadura mágica. En la época de las cruzadas faltaban siglos para las armaduras de placas, así que tratando de mantener algo de rigor histórico, la armadura debe ser del tiempo de lo griegos y romanos, con poderes mágicos.- El yelmo del caballero leproso debe ser algo parecido a esto

[El Analandés]

155
Subes las escaleras resbaladizas de la leprosería, mientras los pobres enfermos se reagrupan alrededor de su jefe. Cierras la puerta tras de ti y te pone el yelmo encantado que te ha dado el caballero. Una nueva fuerza parece correr por tus venas y tu cerebro reacciona con reforzada intensidad. ¡El poder del yelmo es grande! Suma 1 punto de Fuerza a tu total mientras lleves el yelmo. Y ahora vete al 449


Comentario: Ya he dicho que en principio, la armadura es como una coraza normal, los poderes mágicos se manifestarán cuando luchemos contra Thalos. Supongo que te dará fuerza sobrehumana, o que tu espada se convierta en una hoja flamígera, o algo así.

Te queda en este pasillo la puerta con símbolos mágicos

Ve a 585

O vas a explorar el pasillo Oeste, que te copio aquí

OESTE


Ves tres puertas en pared del pasillo. Avanzas hacia el Norte, hasta el fondo del pasillo, y compruebas que una cuarta puerta, cerrada con cerrojo, impide el aso. Si crees que puedes abrir la puerta gracias a un manojo de llaves que has encontrado, vete al 445. De lo contrario, vuelve al comienzo del pasillo.

La puerta de la primera habitación es de madera rústica y en su interior se oyen risas, la segunda tienes unas garras dibujadas y tras ella se escuchan extraños ruidos. La tercera puerta está marcada por un hierro al rojo viva

¿Cuál abrirás?:

¿la puerta de la que escapan risas? 28
¿la puerta marcada con una garra de ave? 354.
¿ la puerta marcada al rojo vivo? Vete al 491

[Dark-kia]

Lo último que esperaba era encontrar una pieza de armadura aquí. Pero en fin, ya tenemos dos (por cierto, antes de ponernos el yelmo lo limpiamos un poquito con una toallita húmeda ), una en el estanque y otra en el pasillo este, así que por lógica la última debe estar en el otro pasillo.

Pese a que creo que cometes un error, no puedo objetar nada, tu paranoia hacia los magos está por desgracia justificada.

Teniendo en cuenta tu comentario... Terminemos de olisquear por la última puerta de este pasillo, a ver que sorpresa nos depara.

Como anécdota, el templario enmascarado me recuerda a la película "Las puertas del cielo":

https://es.wikipedia.org/wiki/Balduino_ ... sal%C3%A9n
Qué casualidad. Aunque en la imagen lleva una máscara y no un yelmo. Balduino IV, 'el leproso', rey de Jerusalem. (Puede que el autor se inspirase en él al escribir el librojuego).

¡Reconozco que me está gustando la trama !

[El Analandés]

Me alegro que te guste la trama. Resulta notable que en todos los librojuegos los combates sean la salsa, pero aquí no hayas tenido que usar la espada todavía, gracias a una combinación de suerte y decisiones acertadas, lo que hace más interesante al librojuego.


585 Con toda precaución te acercas a la puerta que tiene un signo cabalístico. Pones la mano en el pomo y en ese instante un escalofrío recorre tu cuerpo. Reprimiendo las ganas de huir entreabres la puerta y lanzas una ojeada a su interior. Se trata, e apariencia, de una amplia biblioteca, en la que numerosos magos se hallan entregados al estudio de manuscritos antiguos e impresionantes libros de bellas miniaturas. Un silencio casi total reina en la biblioteca. ¿Entrarás en la habitación andando de puntillas (vete al 447)?¿o cerrarás suavemente la puerta sin entrar al 449)?


Teniendo en cuenta tu declaración de intenciones previa y que nunca haces caso de los avisos , entras


447 Te escabulles en el interior de la sala de estudio del mago tratando de hacer menos ruido que un ratón. ¡Pero, de repente, tu espada tropieza con la esquina de la mesa, con un revelador tintineo! Temes lo peor, pero los magos siguen tan profundamente sumidos en sus reflexiones que nadie levanta mirada. Con un suspiro de alivio examinas la gran habitación en la que te encuentras. Ves una pequeña puerta que se abre al otro lado de la sala y que da, sin duda, a otra habitación. Dos magos se dedican a escribir sobre pergaminos antiguos, uno sentado en una mesa, a la derecha de la entrada; el otro de pie ante un pupitre, delante de unos anaqueles. Un grueso libro descansa sobre una mesa próxima abierto por una página llena de dibujos. ¿Qué vas a hacer?


¿Cruzar sin ruido la biblioteca hasta la puerta del fondo? Vete al 412.
¿Mirar el viejo manuscrito de cerca? Vete al 390.
¿Pedir ayuda al mago sentado a la mesa? Vete al 339.
¿Pedir ayuda al mago de pie ante su pupitre? Vete al 42.

[Dark-kia]

(¡Necesito un champú anti piojos ya!)
Ya se que la curiosidad mató al gato, pero aquí solo tengo clara una cosa ¡no entendemos de runas ni de magia! Mejor no tocamos el libro. Los libros son algo muy querido por todos los escribanos y estos no van a ser menos.
Prefiero no abrir la puerta por el momento, me da mala espina. Por ahora los dos magos que hemos encontrado no han sido hostiles, y estos ni se han inmutado después de nuestra gloriosa y torpe entrada. Así que como creo que la cosa está al 50% entre uno y otro tiro un dado.... De 1-3 hablamos con el que está sentado y de 4-6 con el que está de pie.
¡Ha salido un 5!
Me acerco tranquilamente hasta él y dejamos escapar un ligero: ¡Ejeeeeeem!...

[El Analandés]

(¡Necesito un champú anti piojos ya!)

Ya se que la curiosidad mató al gato, pero aquí solo tengo clara una cosa ¡no entendemos de runas ni de magia! Mejor no tocamos el libro.

Que no es el Necronomicon, que ya salió, no seas alérgico a la cultura
En realidad da igual, de caldeo antiguo no entiendes.

Por ahora los dos magos que hemos encontrado no han sido hostiles,

Rendimientos pasados no garantizan rentabilidades futuras, bueno, a ver... *suspiro*

[El Analandés]

42 El aspecto serio del mago que estudia, sin tan siquiera el apoyo de una banqueta de madera, un Libro sagrado de páginas ennegrecidas por una escritura jeroglífica te inspira confianza. Te aproximas al hombre sin vacilar. Lleva un jubón de reflejos verdes acuosos y un bonete de seda color esmeralda. Su rostro brilla con una extraña intensidad. «Oh poderoso mago, ¿puedo merecer tu atención?», le preguntas. Sin levantar los ojos, el hechicero te corta la palabra. «¡Ve a buscar un poco de líquido azul del pozo, aprendiz!», dice tendiéndote un frasco vacío. Y con gesto distraído señala una puerta al fondo de la biblioteca. ¡ Evidentemente, el mago está tan sumido en sus investigaciones que te toma por uno de los aprendices que van y vienen por la sala de estudios! ¿Vas a hacer lo que te pide (vete al 12) o protestar y rechazar el encargo (vete al 654)?

[Dark-kia]

¿La puerta del fondo lleva a un pozo?¿Qué clase de pozo se esconde detrás?... ¿El pozo de los deseos?
¡Venga! Nos mostramos amables y hacemos de chico de los recados... (y de paso cotilleamos un poco )

[El Analandés]

¡Ufffff! ¡Qué alivio!

Acabas de esquivar otra de las muertes automáticas, si te pones chulo con el mago, te convierte ...¡en cucaracha!

[El Analandés]

12 No tienes la menor intención de contrariar al mago, cuyos poderes superan, sin duda, los tuyos, así que tomas el frasco vacío y desapareces hacia el fondo de la sala. Con cierto temor giras el pomo... Y cruzas el umbral. Entras y examinas el lugar. Dos pasillos se alejan hacia el fondo de la sala, que no logras distinguir, separados por altos muros de mármol blanco. Justo delante de ti se levanta un pozo excavado en el suelo, con las paredes recubiertas de ladrillos de arcilla. El pozo parece hundirse profundamente en la roca y un extraño resplandor azulado sale de su interior. El agua o el líquido que rezuma desprende el brillo del zafiro. Éste debe de ser el objetivo de la «misión» que te ha confiado el mago. Examinas los pasadizos que se alejan del pozo y te das cuenta de que se trata de la entrada de un laberinto. De no haber tenido cuidado podías haberte aventurado por ellos, perdiendo la vida. ¿Quién sabe con qué fin esta ala de la fortaleza ha sido consagrada a un laberinto semejante? Dejas de soñar y vuelves a tu tarea. Llenas el frasco del mago de un líquido azul. ¿Abandonarás el lugar y volverás a la sala de estudio (vete al 599) o llenarás una de tus cantimploras con el deslumbrante líquido del color del zafiro (vete al 246)?




Qué bonito color azul ... como la radiación Cherenkov

[Dark-kia]

Podemos llenar una de las cantimploras, sea lo que sea, es mágico y seguramente pueda sernos de utilidad.

[El Analandés]

246 El líquido fascinante que contiene el pozo azul te intriga. Decides llevarte un poco. Llenas una cantimplora de esta agua centelleante y pruebas con la yema del dedo la sustancia transparente de color zafiro. Reconoces inmediatamente el sabor de una sustancia que ya has probado en casa de algunos magos, en el transcurso de tus aventuras. Se trata de una preparación indispensable para una serie de sortilegios y pociones. En etrado bruto, tal como ahora se encuentra, tiene los poderes de una eficaz poción de curación. En la cantimplora hay sitio suficiente para dos dosis. Anótalo en la lista de tus posesiones. Tu valor ha dado sus frutos. Abandonas ya el Laberinto.
Si estás realizando una misión por encargo de algún mago, vete al 599; de lo contrario, vete al 527.


599 Vuelves silenciosamente hacia el mago y le ofreces el frasco que has llenado con el líquido azul. No levanta los ojos de su tarea, pero te da las gracias y te despide con un gesto de la mano. Contento por haber escapado a la cólera de tan temible hechicero, te felicitas por haber salido indemne. ¿Saldrás ahora de la sala de estudio (vete al 411) o, si aún no lo has hecho, hablarás con el mago que consulta un libro mágico sentado ante una mesa (vete al 399)?