Bueno, como sois mi familia librojueguil, os tengo que contar el gran problema que se me ha presentado. Como sabéis, hace poco he anunciado la transcripción de cierto libro, que estará, si sigo a este ritmo, para el Jueves o el Viernes. También me decidí a comenzar a traducir el nº 1 de Blood Sword, cosa que sigo haciendo en mis ratos libres. Además tengo muchos otros hobbies (música, rol, composición, historia, etc...) para cada uno de los cuales tengo proyectos.
Pero la cuestión es... ¿qué pasa con Aquelarre? Pues... francamente, no lo sé. Llevo mucho tiempo ya atascado, sin saber qué hacer. Me siento delante del portátil, esperando que me venga la inspiración para saber solucionar el problema... pero no llega. No llega. Es un libro que comencé hace ya tres años, con un diseño complejísimo, tanto que era demasiado arriesgado, pues o bien significaría que se convertiría en un buen LJ, o bien lo echaría todo a perder tarde o temprano... y eso es lo que está pasando, y no acabo de aceptar. Ese es el problema para el que no me sirve la inspiración. 555 secciones de un LJ que transcurre en la Córdoba bajomedieval, retratando la realidad histórica de la época, barrio por barrio, con multitud de enigmas, multitud de posibilidades, más de 30 hechizos, la mayoría de los cuales pueden usarse en cualquier momento, libertad TOTAL para moverse por la ciudad, dar vueltas por ella, salir y entrar de los sitios teniendo solo en cuenta si están abiertos o cerrados, un LJ donde dependiendo de la hora que sea pueden ocurrir cosas diferentes, donde se puede resolver el enigma principal a través de diferentes mini-enigmas,a elección del jugador, y que contiene multitud de mini-aventuras paralelas... la LIBERTAD padre, vamos.
¡Y NO FUNCIONA! Y no tanto por la forma en la que lo he diseñado, sino porque en la mayoría de las secciones se dedican demasiadas palabras a comentar algo referente a las reglas... que si apunta esto, que si haz esta tirada, que si haces esto tienes que hacer tal tirada y si la psas apuntas nosequé... y eso distrae demasiado al lector de la historia principal. Al querer tener tantas cosas en cuenta (posible uso de hechizos, horas de sueño, saber si has comido, si te has encontrado con tal o cual a esta hora, etc.), hay demasiadas cosas que recordarle al jugador, y ocupan demasiado espacio. Cargante. Injugable. Demasiado pesao, vamos, para entendernos, tener que estar cada dos por tres con tiradita o chorradita para apuntar. Y lo peor de todo es que no hay forma de simplificarlo. Me está costando mucho trabajo aceptarlo, pero... tengo que dejarlo. ¡Después de 3 años escribiéndolo tengo que dejarlo! Tres años de trabajo, con muchísimas horas frente al ordenador y noches de insomnio, con un montón de libros, mapas, papeles y anotaciones sobre la mesa, que ni me cabían en el escritorio, indispensables para escribir el LJ, y todo a la basura. Frustrante, ¿verdad? Pero así es la vida, quien no arriesga no gana.
En fin, que quería desahogarme un poquito. Perdón por el rollazo a los que lo hayáis aguantado y gracias por estar ahí. No sé qué haré ahora con Aquelarre, pero tal vez después de terminar con el Proyecto Endor pueda despejarme un poco las ideas. Al menos, mientras tanto estaré haciendo un bien a la comunidad
