Todos los Personajes Jugadores
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Os despedís a la entrada de la casa, deseándoos suerte. Una despedida casual, como si fuerais a veros al cabo de un rato...
Lucius Thorne y Tresmond de Lof acompañan a Dragón y Gavilán. Por el otro lado, el joven Will se va con Cuervo y Gato.
A medida que vuestros caminos se separan, tratais de evitar el pensar en lo peor, en que si algo sale mal, esta será la última vez que os reunaís.
Pero eso es lo que significa ser un señor del Kai, ser capaz de dar la vida por Sommerlund si fuese necesario.
LA SOMBRA SOBRE RUANON (2ª Parte)
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DRÁGALIN
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Horario: Mañana
Lugar: La Mano/ Torre de la Biblioteca
Dan Vanalund pasea por la Gran Biblioteca. En los últimos días los pasillos de palacio parecen haberse vuelto oscuros y lóbregos. Y se siente más sólo que nunca. La muerte de su hermano mayor, Aladar, ha sumido en la apatía y el silencio a su padre. Su hermana Irina cada día parece adentrarse más y más en ese sueño antinatural que la tiene atrapada, y La Mano está repleta de desconocidos: esos caballeros y arcabuceros, que lo miran de esa manera tan extraña.
Y sabe por qué. Porque ahora él es el Heredero de la Baronía. Ha oido hablar a los arcabuceros de eso como si fuera importante. Dan no lo entiende, sólo tiene nueve años, todavía queda mucho para convertirse en el siguiente Barón de Ruanon ¿verdad?
Por lo menos en la biblioteca lo dejan en paz esos arcabuceros. Dan se pregunta dónde están los guardias de toda la vida, los guardias de palacio, a los que dirigía Weyland Thorne y a los que conocía bien. Ha preguntado por ellos, pero no le han dado ninguna respuesta...
Entonces ve algo en el suelo. Es un libro. Parece dañado, con el lomo estropeado por el tiempo y por quemaduras de algún tipo. Lo recoge y lee el título: Linajes e historia de las Grandes Casas de Sommerlund, con muchas descripciones de nobles caballeros, damas y sus descendientes.
A Dan le suena de algo, pero no recuerda de qué. Lleva el pesado volumen hasta una mesa y lo examina con cuidado. No sólo está quemado en varias partes, sino que incluso le faltan varias páginas. Por suerte, observa en la primera página que no se trata de un manuscrito original, sino de una copia. Al parecer el original se encuentra... en esta misma biblioteca.
Dan se muerde el labio ¿dónde lo ha visto antes? Está seguro de haberlo visto antes, no este libro, sino el original, pero no aquí en la biblioteca, sino...
Entonces lo recuerda. De sopetón cierra el libro, se lo coloca bajo el brazo y sale de la Gran Biblioteca, asegurándose que no haya ningún caballero. Baja las escaleras hasta el rellano inferior. Ante una puerta de madera negra con extrañas runas alrededor.
Dan se acerca despacio y empuja la puerta, que se abre suavemente. Como suponía, los hechizos de protección que protegían la entrada del laboratorio del Maestro Dragair se han desvanecido con su muerte.
Dentro está oscuro, por lo que Dan enciende una vela que hay cerca de la entrada, y con ella se interna en el gran laboratorio. Y al poco, encuentra lo que está buscando. Sobre un atril, abierto, se encuentra el original de la copia que lleva bajo el brazo.
Es muy curioso. El libro se encuentra abierto por la página que trata del linaje Vanalund.
Dan se aproxima y empieza a leer la historia de su familia...
Horario: Mañana
Lugar: La Mano/ Torre de la Biblioteca
Dan Vanalund pasea por la Gran Biblioteca. En los últimos días los pasillos de palacio parecen haberse vuelto oscuros y lóbregos. Y se siente más sólo que nunca. La muerte de su hermano mayor, Aladar, ha sumido en la apatía y el silencio a su padre. Su hermana Irina cada día parece adentrarse más y más en ese sueño antinatural que la tiene atrapada, y La Mano está repleta de desconocidos: esos caballeros y arcabuceros, que lo miran de esa manera tan extraña.
Y sabe por qué. Porque ahora él es el Heredero de la Baronía. Ha oido hablar a los arcabuceros de eso como si fuera importante. Dan no lo entiende, sólo tiene nueve años, todavía queda mucho para convertirse en el siguiente Barón de Ruanon ¿verdad?
Por lo menos en la biblioteca lo dejan en paz esos arcabuceros. Dan se pregunta dónde están los guardias de toda la vida, los guardias de palacio, a los que dirigía Weyland Thorne y a los que conocía bien. Ha preguntado por ellos, pero no le han dado ninguna respuesta...
Entonces ve algo en el suelo. Es un libro. Parece dañado, con el lomo estropeado por el tiempo y por quemaduras de algún tipo. Lo recoge y lee el título: Linajes e historia de las Grandes Casas de Sommerlund, con muchas descripciones de nobles caballeros, damas y sus descendientes.
A Dan le suena de algo, pero no recuerda de qué. Lleva el pesado volumen hasta una mesa y lo examina con cuidado. No sólo está quemado en varias partes, sino que incluso le faltan varias páginas. Por suerte, observa en la primera página que no se trata de un manuscrito original, sino de una copia. Al parecer el original se encuentra... en esta misma biblioteca.
Dan se muerde el labio ¿dónde lo ha visto antes? Está seguro de haberlo visto antes, no este libro, sino el original, pero no aquí en la biblioteca, sino...
Entonces lo recuerda. De sopetón cierra el libro, se lo coloca bajo el brazo y sale de la Gran Biblioteca, asegurándose que no haya ningún caballero. Baja las escaleras hasta el rellano inferior. Ante una puerta de madera negra con extrañas runas alrededor.
Dan se acerca despacio y empuja la puerta, que se abre suavemente. Como suponía, los hechizos de protección que protegían la entrada del laboratorio del Maestro Dragair se han desvanecido con su muerte.
Dentro está oscuro, por lo que Dan enciende una vela que hay cerca de la entrada, y con ella se interna en el gran laboratorio. Y al poco, encuentra lo que está buscando. Sobre un atril, abierto, se encuentra el original de la copia que lleva bajo el brazo.
Es muy curioso. El libro se encuentra abierto por la página que trata del linaje Vanalund.
Dan se aproxima y empieza a leer la historia de su familia...
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DRÁGALIN
Dragón Carmesí / Gavilán Temerario
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Os moveis por las calles del Barrio Viejo tratando de no llamar la atención, con las capuchas de vuestras oscuras capas echadas. La presencia de la guardia de la ciudad se nota por todas partes, pero aun así pasais desapercibidos entre toda la multitud que se dirige hacia la plaza frente a la Catedral de Ishir.
Al parecer, el funeral por la Suma Sacerdotisa Dayia, líder espiritual de la Baronía y hermana mayor del Barón Derek Vanalund, ha movilizado a la ciudad de Ruanon.
Lucius os hace deteneros un momento para deciros que él va a asegurar el lugar donde llevaréis a Sir Jester si es que lográis secuestrarlo.
Nos encontraremos frente a la posada del caballo blanco dentro de una hora. Dice el anciano. ¿De acuerdo?
Asentís y veis como Lucius desaparece por una callejuela. Tresmond os habla en voz baja: Dentro de una hora, los chicos de Will nos darán el recorrido de sir Jester y su escolta. Hasta entonces, quisiera acercarme a la Catedral, para echar un vistazo a nuestra presa. Creo que habéis mostrado interés en hacerlo ¿no?
Parece ser una buena idea, y así se lo decís al bardo.
Muy bien. Responde Tresmond con una sonrisa jovial. Pero hemos de decidir cómo hacerlo. Conozco una ruta por los tejados frente a la catedral desde la que veremos toda la plaza desde una distancia segura... O si lo deseáis, podemos acercarnos a pie entre la multitud. Con un poco de maña, podremos colocarnos muy próximos de la entrada a la Catedral, y echar un vistazo más de cerca...
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Os moveis por las calles del Barrio Viejo tratando de no llamar la atención, con las capuchas de vuestras oscuras capas echadas. La presencia de la guardia de la ciudad se nota por todas partes, pero aun así pasais desapercibidos entre toda la multitud que se dirige hacia la plaza frente a la Catedral de Ishir.
Al parecer, el funeral por la Suma Sacerdotisa Dayia, líder espiritual de la Baronía y hermana mayor del Barón Derek Vanalund, ha movilizado a la ciudad de Ruanon.
Lucius os hace deteneros un momento para deciros que él va a asegurar el lugar donde llevaréis a Sir Jester si es que lográis secuestrarlo.
Nos encontraremos frente a la posada del caballo blanco dentro de una hora. Dice el anciano. ¿De acuerdo?
Asentís y veis como Lucius desaparece por una callejuela. Tresmond os habla en voz baja: Dentro de una hora, los chicos de Will nos darán el recorrido de sir Jester y su escolta. Hasta entonces, quisiera acercarme a la Catedral, para echar un vistazo a nuestra presa. Creo que habéis mostrado interés en hacerlo ¿no?
Parece ser una buena idea, y así se lo decís al bardo.
Muy bien. Responde Tresmond con una sonrisa jovial. Pero hemos de decidir cómo hacerlo. Conozco una ruta por los tejados frente a la catedral desde la que veremos toda la plaza desde una distancia segura... O si lo deseáis, podemos acercarnos a pie entre la multitud. Con un poco de maña, podremos colocarnos muy próximos de la entrada a la Catedral, y echar un vistazo más de cerca...
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DRÁGALIN
Cuervo Vigía / Gato Alado
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Will os lleva por callejuelas cada vez más estrechas y sinuosas, haciendo que casi perdáis la orientación. Además, el muchacho se mueve con rapidez, con lo que debéis ser veloces para no perderlo.
De pronto, casi sin daros cuenta, habéis entrado en una casa de madera que más bien parece un corral o una chabola. En su interior sólo hay una niña pequeña, de unos cinco años, pelando patatas en una cacerola. La chiquilla levanta la vista, sorprendida al veros.
¡Marta! Le dice Will revolviéndole el pelo con una sonrisa. ¿Dónde están?
La niña suelta una risita y señala un arcón que hay en un lado. Will lo abre inmediatamente y saca unas ropas que había en él, arrojándooslas.
Uniformes de la guardia de la ciudad. Dice sonriendo. Los robamos hace varios meses.
Les echais un vistazo. Principalmente se componen de una túnica oscura con el emblema de Ruanon (podeis llevar debajo vuestra armadura de cota de cuero de Señores del Kai sin que se note) y capas de tono rojo oscuro.
Sin perder tiempo, os cambiais de ropas. Por suerte, las tallas os van bastante bien y con unos pequeños ajustes parece que son vuestras de toda la vida. Al cabo de media hora estáis listos. Will sonríe al veros.
Muy bien, pero ahora hay que complementar el disfraz. Todos los guardias van equipados con esto.
El chico rebusca entre un montón de paja cercano y saca dos espadas con sus vainas y sus correas, dos lanzas de mano, y dos yelmos abiertos con protector para la nariz.
Ese es el equipo básico de la guardia. Pero... Will mira a Inquisidora y Cicatriz, vuestras respectivas hachas. Los guardias no usan ese tipo de armas, será mejor que las llevéis ocultas bajo las capas ¿de acuerdo?
Así lo hacéis, mientras os miráis entre vosotros, satisfechos.
Puede que esto no sea suficiente. Os advierte Will. Recordad que debeís comportaros como un guardia, moveros como ellos, no hacer nada fuera de lugar. También tenéis que tratar de imitar el acento de Ruanon, que no se note que sois del norte ¿vale?
De esta manera, aprovecháis el tiempo hasta que os poneis en marcha en preparar vuestro aspecto, modales y lenguaje. Gracias a la disciplina de Camuflaje no teneis problema en hacerlo.
Por su parte, Will también se prepara. El chico se a atizado un golpe a sí mismo en la cara (para dar veracidad a la historia de que lo habéis capturado) y se ha atado las manos a la espalda con cuerdas (con nudos falsos, claro).
Will hecha un vistazo al Sol en el cielo.
El funeral de la Suma Sacerdotisa está a punto de empezar. Es hora de ponernos en marcha.
Sin perder un segundo salís a la calle, llevando los dos agarrados al chico por los hombros. Vuestro destino es el Acuartelamiento de los Caballeros, a unas cuantas manzanas de aquí.
Las calles todavía siguen llenas de gente que va a la Catedral y alrededores. Parece que ha venido gente de toda la Baronía. Por suerte, esto es bueno para vosotros, ya que así pasaréis mas desapercibid...¡Eh, vosotros!
Os volvéis de sopetón para encontraros con una pareja de guardias de Ruanon, que se os acercan. Sin duda habéis tenido mala suerte, deben de haber doblado una esquina hace un momento y no los habéis visto.
El guardia que os ha hablado os mira con desconfianza. ¿Quiénes sois? No me suena vuestra cara. ¿A qué distrito pertenecéis?
Os miráis entre vosotros un instante. Estáis en medio de una concurrida calle, y sabéis que si no solucionáis este problema rápido y bien, todo puede acabarse antes de empezar.
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Will os lleva por callejuelas cada vez más estrechas y sinuosas, haciendo que casi perdáis la orientación. Además, el muchacho se mueve con rapidez, con lo que debéis ser veloces para no perderlo.
De pronto, casi sin daros cuenta, habéis entrado en una casa de madera que más bien parece un corral o una chabola. En su interior sólo hay una niña pequeña, de unos cinco años, pelando patatas en una cacerola. La chiquilla levanta la vista, sorprendida al veros.
¡Marta! Le dice Will revolviéndole el pelo con una sonrisa. ¿Dónde están?
La niña suelta una risita y señala un arcón que hay en un lado. Will lo abre inmediatamente y saca unas ropas que había en él, arrojándooslas.
Uniformes de la guardia de la ciudad. Dice sonriendo. Los robamos hace varios meses.
Les echais un vistazo. Principalmente se componen de una túnica oscura con el emblema de Ruanon (podeis llevar debajo vuestra armadura de cota de cuero de Señores del Kai sin que se note) y capas de tono rojo oscuro.
Sin perder tiempo, os cambiais de ropas. Por suerte, las tallas os van bastante bien y con unos pequeños ajustes parece que son vuestras de toda la vida. Al cabo de media hora estáis listos. Will sonríe al veros.
Muy bien, pero ahora hay que complementar el disfraz. Todos los guardias van equipados con esto.
El chico rebusca entre un montón de paja cercano y saca dos espadas con sus vainas y sus correas, dos lanzas de mano, y dos yelmos abiertos con protector para la nariz.
Ese es el equipo básico de la guardia. Pero... Will mira a Inquisidora y Cicatriz, vuestras respectivas hachas. Los guardias no usan ese tipo de armas, será mejor que las llevéis ocultas bajo las capas ¿de acuerdo?
Así lo hacéis, mientras os miráis entre vosotros, satisfechos.
Puede que esto no sea suficiente. Os advierte Will. Recordad que debeís comportaros como un guardia, moveros como ellos, no hacer nada fuera de lugar. También tenéis que tratar de imitar el acento de Ruanon, que no se note que sois del norte ¿vale?
De esta manera, aprovecháis el tiempo hasta que os poneis en marcha en preparar vuestro aspecto, modales y lenguaje. Gracias a la disciplina de Camuflaje no teneis problema en hacerlo.
Por su parte, Will también se prepara. El chico se a atizado un golpe a sí mismo en la cara (para dar veracidad a la historia de que lo habéis capturado) y se ha atado las manos a la espalda con cuerdas (con nudos falsos, claro).
Will hecha un vistazo al Sol en el cielo.
El funeral de la Suma Sacerdotisa está a punto de empezar. Es hora de ponernos en marcha.
Sin perder un segundo salís a la calle, llevando los dos agarrados al chico por los hombros. Vuestro destino es el Acuartelamiento de los Caballeros, a unas cuantas manzanas de aquí.
Las calles todavía siguen llenas de gente que va a la Catedral y alrededores. Parece que ha venido gente de toda la Baronía. Por suerte, esto es bueno para vosotros, ya que así pasaréis mas desapercibid...¡Eh, vosotros!
Os volvéis de sopetón para encontraros con una pareja de guardias de Ruanon, que se os acercan. Sin duda habéis tenido mala suerte, deben de haber doblado una esquina hace un momento y no los habéis visto.
El guardia que os ha hablado os mira con desconfianza. ¿Quiénes sois? No me suena vuestra cara. ¿A qué distrito pertenecéis?
Os miráis entre vosotros un instante. Estáis en medio de una concurrida calle, y sabéis que si no solucionáis este problema rápido y bien, todo puede acabarse antes de empezar.
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Parsion
- Gran Sol
- Mensajes: 2704
- Registrado: 27-Mar-2005, 0:36
- Ubicación: Sommerlund´s Forest
- Contactar:
Me esfuerzo sobremanera en imitar el acento y las formas típicas de Ruanon, miro a los ojos del guardia para mostrarme más convincente, pero adopto un gesto cansado y aburrido, acorde con lo que voy a decir:
-Es normal que no nos conozcas, somos reservistas, de la leva de la ciudad y nos han llamado mientras pasan estos días de revuelo por la ciudad, la verdad es que lo único que queremos es dejar ésto y volver a nuestras quehaceres normales.
-Es normal que no nos conozcas, somos reservistas, de la leva de la ciudad y nos han llamado mientras pasan estos días de revuelo por la ciudad, la verdad es que lo único que queremos es dejar ésto y volver a nuestras quehaceres normales.
¡EL SEÑOR DEL KAI HA VUELTO!
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Fantasma Grunweazel
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DRÁGALIN
Cuervo Vigía / Gato Alado
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
El guardia que os ha preguntado suelta un bufido y después escupe al suelo.
Desde luego, hoy en día dejan entrar a cualquiera en la guardia.
Y con esto, la pareja de guardias se aleja por la calle. Vosotros, aliviados, dais media vuelta y, llevando a Will entre vosotros, os dirigís al Acuartelamiento de los Caballeros.
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
El guardia que os ha preguntado suelta un bufido y después escupe al suelo.
Desde luego, hoy en día dejan entrar a cualquiera en la guardia.
Y con esto, la pareja de guardias se aleja por la calle. Vosotros, aliviados, dais media vuelta y, llevando a Will entre vosotros, os dirigís al Acuartelamiento de los Caballeros.
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DRÁGALIN
Dragón Carmesí / Gavilán Temerario
Horario: Mañana
Lugar: Barrio Viejo / Catedral de Ishir
Tumbados en un tejado de una mansión que da a la plaza frente a la Catedral de Ishir, contempláis el panorama.
Tanto la plaza como las calles anexas están a reventar de ruaneses, y por doquier se ve a grupos de guardias tratando de poner orden en el caos. Varias escuadras de caballeros están dispuestas alrededor de la Catedral, dejándo paso a ella sólo a las altas autoridades y a las clases altas de la Baronía, mientras el resto de la gente tiene que contentarse con quedarse en la plaza.
Mientras esperáis la llegada de sir Jester Crow (vuestra presa), Tresmond os habla de las autoridades que van a asistir al funeral:
Además del Barón Derek Vanalund, asistirán los señores de las principales familias nobles vasallas de la Casa Vanalund, la oligarquía de Ruanon; la Casa Anskar, la Casa Furia, la Casa Crow y la Casa Tiddar. También estarán los principales miembros de la jerarquía eclesiástica, y al frente de ellos el que se convertirá en el próximo Sumo Sacerdote, el Sacerdote primado de Ishir, Luanus (con el que os entrevistásteis cuando fuiste a la Catedral por primera vez), que también será el encargado de oficiar el funeral.
Tresmond os llama la atención hacia un lujoso carruaje que se detiene ante la entrada de la Catedral. De él descienden dos personas. A uno lo conocéis, es Courtland Tiddar, uno de los miembros del Consejo Privado del Barón y representante del Gremio de Comerciantes. La otra es una mujer alta y de rasgos delicados, de unos cuarenta años, pero todavía hermosa, con el pelo castaño largo peinado hacia atrás y ojos negros como la noche. Su vestimenta es exquisita, terciopelo negro con decoraciones de brillantes y plata. Tresmond os dice que es Lady Ekaterina Tiddar, la Gran Maestre del poderoso Gremio de Comerciantes, una de las personas más influyentes de Ruanon y posiblemente la mujer más rica de Sommerlund. Y aunque no disponen de ninguna prueba, tanto Tresmond como Lucius saben que es imposible que la conspiración que se está llevando a cabo no podría realizarse sin el consentimiento de esta mujer...
Pocos minutos después el que llega es el Barón Derek Vanalund, acompañado de una escuadra de caballeros y escoltado de cerca por Brendan Furia, de su guardia personal.
Sabéis que será muy comentado el hecho de que ninguno de los hijos del Barón haya venido al funeral, pero lo que el pueblo todavía no sabe es que Aladar, el Heredero, ha sido asesinado la noche pasada; que Irina Vanalund está sumida en un sueño entre la vida y la muerte; y que el hijo pequeño, Dan, esté seguramente siendo usado por los Caballeros para asegurar el buen comportamiento del Barón.
Finalmente, aparece sir Jester Crow, Comandante en Jefe de los Caballeros. Al ver su escolta, un escalofrío os recorre. Doce. Son doce caballeros, todos con armaduras de placas que los cubren de arriba abajo. Doce con sus monturas, poderosos caballos de guerra, protegidos también con armadura. Sabéis que tendreís que ser muy hábiles y astutos para poder secuestrar a Crow.
Además, al verlo, con su armadura reluciente, comprendeís el problema que supondrá llevarselo. Con esa armadura encima debe pesar una tonelada. Si lo dejáis inconsciente, arrastrarlo por las calles os va a costar demasiado tiempo, y se supone que tendréis que ser rápidos.
Mientras os preocupáis por este hecho, el funeral comienza en la Catedral. Se abre con un sermón del Hermano Luanus, que es repetido en el exterior de la Catedral por otros monjes para que todo el mundo en el exterior pueda oirlo.
Y aunque el sermón de Luanus empieza sobre las virtudes y bondades de la difunta Suma Sacerdotisa, pronto degenera hacia la exaltación de la religión y sobre todo de la nacionalidad Ruanesa... incluso de la raza Ruanesa. Observais con preocupación como la gente no sólo acepta lo que dicen sin dudar sino que incluso algunos exaltados lanzan aclamaciones entusiastas.
Después miráis la ciudad de Ruanon, toda erizada en sus tejados de banderas de Ruanon (y ninguna bandera de Sommerlund, observais).
A vuestro lado, el bardo durenés mueve la cabeza.
Ha estado sucediendo desde hace mucho tiempo... todo esto... Llevan mucho tiempo preparando... adoctrinando a la gente de Ruanon. Para este día...
Suficiente por ahora. Os susurra Tresmond. Hemos de volver para encontrarnos con Lucius. Hay que preparar la emboscada.
Horario: Mañana
Lugar: Barrio Viejo / Catedral de Ishir
Tumbados en un tejado de una mansión que da a la plaza frente a la Catedral de Ishir, contempláis el panorama.
Tanto la plaza como las calles anexas están a reventar de ruaneses, y por doquier se ve a grupos de guardias tratando de poner orden en el caos. Varias escuadras de caballeros están dispuestas alrededor de la Catedral, dejándo paso a ella sólo a las altas autoridades y a las clases altas de la Baronía, mientras el resto de la gente tiene que contentarse con quedarse en la plaza.
Mientras esperáis la llegada de sir Jester Crow (vuestra presa), Tresmond os habla de las autoridades que van a asistir al funeral:
Además del Barón Derek Vanalund, asistirán los señores de las principales familias nobles vasallas de la Casa Vanalund, la oligarquía de Ruanon; la Casa Anskar, la Casa Furia, la Casa Crow y la Casa Tiddar. También estarán los principales miembros de la jerarquía eclesiástica, y al frente de ellos el que se convertirá en el próximo Sumo Sacerdote, el Sacerdote primado de Ishir, Luanus (con el que os entrevistásteis cuando fuiste a la Catedral por primera vez), que también será el encargado de oficiar el funeral.
Tresmond os llama la atención hacia un lujoso carruaje que se detiene ante la entrada de la Catedral. De él descienden dos personas. A uno lo conocéis, es Courtland Tiddar, uno de los miembros del Consejo Privado del Barón y representante del Gremio de Comerciantes. La otra es una mujer alta y de rasgos delicados, de unos cuarenta años, pero todavía hermosa, con el pelo castaño largo peinado hacia atrás y ojos negros como la noche. Su vestimenta es exquisita, terciopelo negro con decoraciones de brillantes y plata. Tresmond os dice que es Lady Ekaterina Tiddar, la Gran Maestre del poderoso Gremio de Comerciantes, una de las personas más influyentes de Ruanon y posiblemente la mujer más rica de Sommerlund. Y aunque no disponen de ninguna prueba, tanto Tresmond como Lucius saben que es imposible que la conspiración que se está llevando a cabo no podría realizarse sin el consentimiento de esta mujer...
Pocos minutos después el que llega es el Barón Derek Vanalund, acompañado de una escuadra de caballeros y escoltado de cerca por Brendan Furia, de su guardia personal.
Sabéis que será muy comentado el hecho de que ninguno de los hijos del Barón haya venido al funeral, pero lo que el pueblo todavía no sabe es que Aladar, el Heredero, ha sido asesinado la noche pasada; que Irina Vanalund está sumida en un sueño entre la vida y la muerte; y que el hijo pequeño, Dan, esté seguramente siendo usado por los Caballeros para asegurar el buen comportamiento del Barón.
Finalmente, aparece sir Jester Crow, Comandante en Jefe de los Caballeros. Al ver su escolta, un escalofrío os recorre. Doce. Son doce caballeros, todos con armaduras de placas que los cubren de arriba abajo. Doce con sus monturas, poderosos caballos de guerra, protegidos también con armadura. Sabéis que tendreís que ser muy hábiles y astutos para poder secuestrar a Crow.
Además, al verlo, con su armadura reluciente, comprendeís el problema que supondrá llevarselo. Con esa armadura encima debe pesar una tonelada. Si lo dejáis inconsciente, arrastrarlo por las calles os va a costar demasiado tiempo, y se supone que tendréis que ser rápidos.
Mientras os preocupáis por este hecho, el funeral comienza en la Catedral. Se abre con un sermón del Hermano Luanus, que es repetido en el exterior de la Catedral por otros monjes para que todo el mundo en el exterior pueda oirlo.
Y aunque el sermón de Luanus empieza sobre las virtudes y bondades de la difunta Suma Sacerdotisa, pronto degenera hacia la exaltación de la religión y sobre todo de la nacionalidad Ruanesa... incluso de la raza Ruanesa. Observais con preocupación como la gente no sólo acepta lo que dicen sin dudar sino que incluso algunos exaltados lanzan aclamaciones entusiastas.
Después miráis la ciudad de Ruanon, toda erizada en sus tejados de banderas de Ruanon (y ninguna bandera de Sommerlund, observais).
A vuestro lado, el bardo durenés mueve la cabeza.
Ha estado sucediendo desde hace mucho tiempo... todo esto... Llevan mucho tiempo preparando... adoctrinando a la gente de Ruanon. Para este día...
Suficiente por ahora. Os susurra Tresmond. Hemos de volver para encontrarnos con Lucius. Hay que preparar la emboscada.
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DRÁGALIN
Cuervo Vigía / Gato Alado
Horario: Mañana
Lugar: Barrio Viejo / Acuartelamiento de los Caballeros
Mientras os aproximais al Acuartelamiento,Will os explica cómo es que los Caballeros ofrecen por él la pequeña fortuna de veinticinco Coronas de oro.
Y es que hace cosa de un año, el chaval se infiltró dentro del cuartel general de los caballeros haciendo pasar por un criado, llegando a convertirse en uno de los criados de los oficiales de mayor rango. Cuando se fue de allí, lo hizo con robándole documentos importantes a sir Jester, además de una daga enjoyada a la que tenía mucho apego.
Will tiene una sonrisa de oreja a oreja al recordarlo. El problema fue que a Crow no le gustó que lo pusiera en ridículo un crío, y desde entonces han puesto precio a su cabeza.
Ya podeis ver el Acuartelamiento. Se trata de una extensión considerable de terreno, levantado en una pequeña colina y separado de los edificios del resto de la ciudad. Todo su perímetro está protegido por una muralla de piedra de cuatro metros ante la cual se extiende un foso seco con picas de hierro.
Sólo hay tres accesos. Os dirigís a uno en concreto, el que Will os ha dicho que se encuentra más cerca de los calabozos. Según el chico, se encuentran en un edificio de una planta, aislado, situado a la derecha de la gran explanada según entreis al Acuartelamiento.
El plan parece simple, con la excusa de custodiar a Will y cobrar la recompensa, entraréis en el Acuartelamiento y lo conduciréis hasta dentro del bloque prisión. Puede que no sea fácil, porque según os ha contado el chico, a los Caballeros no les gusta demasiado la guardia de la ciudad, de hecho, los desprecian y se sienten superiores a ellos.
Por fin os encontráis ante la entrada, unas grandes puertas de madera reforzadas con planchas de acero, con dos torres defensivas a ambos lados, custodiadas por ballesteros. Frente a la puerta hay tres caballeros pertrechados con armaduras de cota de mallas, lanzas y espadas.
Avanzáis hacia ellos.
Horario: Mañana
Lugar: Barrio Viejo / Acuartelamiento de los Caballeros
Mientras os aproximais al Acuartelamiento,Will os explica cómo es que los Caballeros ofrecen por él la pequeña fortuna de veinticinco Coronas de oro.
Y es que hace cosa de un año, el chaval se infiltró dentro del cuartel general de los caballeros haciendo pasar por un criado, llegando a convertirse en uno de los criados de los oficiales de mayor rango. Cuando se fue de allí, lo hizo con robándole documentos importantes a sir Jester, además de una daga enjoyada a la que tenía mucho apego.
Will tiene una sonrisa de oreja a oreja al recordarlo. El problema fue que a Crow no le gustó que lo pusiera en ridículo un crío, y desde entonces han puesto precio a su cabeza.
Ya podeis ver el Acuartelamiento. Se trata de una extensión considerable de terreno, levantado en una pequeña colina y separado de los edificios del resto de la ciudad. Todo su perímetro está protegido por una muralla de piedra de cuatro metros ante la cual se extiende un foso seco con picas de hierro.
Sólo hay tres accesos. Os dirigís a uno en concreto, el que Will os ha dicho que se encuentra más cerca de los calabozos. Según el chico, se encuentran en un edificio de una planta, aislado, situado a la derecha de la gran explanada según entreis al Acuartelamiento.
El plan parece simple, con la excusa de custodiar a Will y cobrar la recompensa, entraréis en el Acuartelamiento y lo conduciréis hasta dentro del bloque prisión. Puede que no sea fácil, porque según os ha contado el chico, a los Caballeros no les gusta demasiado la guardia de la ciudad, de hecho, los desprecian y se sienten superiores a ellos.
Por fin os encontráis ante la entrada, unas grandes puertas de madera reforzadas con planchas de acero, con dos torres defensivas a ambos lados, custodiadas por ballesteros. Frente a la puerta hay tres caballeros pertrechados con armaduras de cota de mallas, lanzas y espadas.
Avanzáis hacia ellos.
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DRÁGALIN
Dragón Carmesí / Gavilán Temerario
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Os encontráis de nuevo con Lucius en la trastienda de una tienda de vinos, frente al lugar donde habéis quedado, de la que parece ser que Tresmond es amigo del propietario. También hay un par de críos pequeños (chavales de la banda de Will) que están explicando al anciano la ruta que ha seguido la comitiva de sir Jester sobre un mapa de la ciudad de Ruanon que está desplegado en la mesa.
Tresmond os sirve unas jarras de vino dulce sureño mientras Lucius marca la ruta en el mapa con una pluma. Al terminar, os enseña el plano con un gesto de preocupación.
El bardo se inclina sobre el, lo examina, y maldice:
¡Por el Sello de Hammerdal! ¡Que mala suerte hemos tenido!
Vosotros le pedis que os explique que pasa, y es Lucius quien os muestra la ruta que hay marcada en el mapa.
Es el camino que han tomado. No hay ninguna calle por las que va a pasar la escolta en la que haya un acceso válido para entrar en las alcantarillas...
Tresmond marca un punto en el mapa, una calle paralela a la que sigue el camino de la escolta, más o menos por la mitad del recorrido. Al parecer en esa calle se encuentra el acceso a las alcantarillas más cercano a la ruta de la comitiva.
Lucius os mira fijamente.
No queda mucho tiempo. Hay que decidir cómo plantear la emboscada. Dejo la decisión final en vuestras manos.
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Os encontráis de nuevo con Lucius en la trastienda de una tienda de vinos, frente al lugar donde habéis quedado, de la que parece ser que Tresmond es amigo del propietario. También hay un par de críos pequeños (chavales de la banda de Will) que están explicando al anciano la ruta que ha seguido la comitiva de sir Jester sobre un mapa de la ciudad de Ruanon que está desplegado en la mesa.
Tresmond os sirve unas jarras de vino dulce sureño mientras Lucius marca la ruta en el mapa con una pluma. Al terminar, os enseña el plano con un gesto de preocupación.
El bardo se inclina sobre el, lo examina, y maldice:
¡Por el Sello de Hammerdal! ¡Que mala suerte hemos tenido!
Vosotros le pedis que os explique que pasa, y es Lucius quien os muestra la ruta que hay marcada en el mapa.
Es el camino que han tomado. No hay ninguna calle por las que va a pasar la escolta en la que haya un acceso válido para entrar en las alcantarillas...
Tresmond marca un punto en el mapa, una calle paralela a la que sigue el camino de la escolta, más o menos por la mitad del recorrido. Al parecer en esa calle se encuentra el acceso a las alcantarillas más cercano a la ruta de la comitiva.
Lucius os mira fijamente.
No queda mucho tiempo. Hay que decidir cómo plantear la emboscada. Dejo la decisión final en vuestras manos.
Sopesando la situacion y ante el mapa mental de mi mente esta es mi decision:
¡Muy bien asi lo haremos! dejaremos pasar a los caballeros y a Jester pero en cuanto este pase cerraremos el callejon por lo dos lados, luego mi hermano y yo tumbaremos a toda la guardia gracias nuestros poderes psiquicos, le quitaremos la armadura y las armas a Jester, pasaremos por las casas colindantes hasta el callejon elegido y ahi volveremos a cerrarlo para meternos en las alcantarillas...
En cuanto a nuestro pequeño ejercito improvisado solo saldra para cerrar las calles, abrinos las puertas, abrir las alcantarillas, y solo en caso de emergencia, ayudarnos contra los soldados...
Si todo sale biene en un par de horas habremos acabado si no...
Con una sonrisa despectiva callo lo que puede pasar si fracasmos, despues de todo ya sabemos todos lo que nos jugamos...
¡Muy bien asi lo haremos! dejaremos pasar a los caballeros y a Jester pero en cuanto este pase cerraremos el callejon por lo dos lados, luego mi hermano y yo tumbaremos a toda la guardia gracias nuestros poderes psiquicos, le quitaremos la armadura y las armas a Jester, pasaremos por las casas colindantes hasta el callejon elegido y ahi volveremos a cerrarlo para meternos en las alcantarillas...
En cuanto a nuestro pequeño ejercito improvisado solo saldra para cerrar las calles, abrinos las puertas, abrir las alcantarillas, y solo en caso de emergencia, ayudarnos contra los soldados...
Si todo sale biene en un par de horas habremos acabado si no...
Con una sonrisa despectiva callo lo que puede pasar si fracasmos, despues de todo ya sabemos todos lo que nos jugamos...
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DRÁGALIN
Cuervo Vigía / Gato Alado
Horario: Mañana
Lugar: Acuartelamiento de los Caballeros
Los caballeros de la entrada del Acuartelamiento se tragan vuestra historia de la captura del ladronzuelo y de que venís a cobrar la recompensa. De hecho, reconocen a Will y hacen algunas bromas de mal gusto sobre lo que sir Jester hará con el chaval en cuanto se entere de que lo han capturado.
Atravesando la entrada por una pequeña puerta anexa entráis en el cuartel general de los caballeros.
Os encontráis en una gran explanada central que es donde los caballeros deben formar y practicar la doma de caballos. El gran edificio fortificado al otro lado de la explanada debe ser el cuartel general en sí y la residencia de los oficiales de alto rango. Alrededor de la explanada hay más edificios y grandes barracones, aunque vuestro objetivo es un edificio de piedra de una planta situado a vuestra derecha.
Tratais de mantener la calma al ver que hay caballeros por todas partes: haciendo sus quehaceres diarios, patrullas de guardia, entrenamientos a pie o a caballo...
Un caballero que vigila la entrada por el lado interior os indica el bloque prisión y que pidais hablar con el sargento Vernet.
Con esto, empezais a atravesar la explanada paso a paso mientras recordáis lo que Will os dijo sobre ella:
El bloque prisión consta de la planta principal y tres niveles subterráneos. Los caballeros que vais a tratar de liberar se encuentran en el tercer nivel, el mas profundo.
En la planta principal se encuentran las habitaciones del sargento de la prisión, y una sala común y dormitorios de los carceleros (no teneis ni idea de los que puede haber en esa sala o durmiendo en los dormitorios).
Después, cada nivel de los calabozos tiene dos guardias que poseen las llaves de los calabozos de ese nivel, los calabozos en sí y una sala para esos guardias.
Algo que debeis tener muy en cuenta es que cada nivel de la prisión se comunica por unas escaleras bloqueadas por puertas enrejadas cerradas. Las llaves de estas puertas las poseen los guardias del nivel superior. Esto significa que la llave de la reja que comunica el nivel tres con el dos la poseen los guardias del nivel dos, y así sucesivamente. Esta es una medida de seguridad para que si hubiera una fuga los presos no pudieran acceder a los niveles superiores.
Por último, la ruta de escape. Se trata de una letrina que hay en el nivel dos de la prisión. Esto a vosotros no os convence demasiado, pero Will parece muy seguro de sí mismo, ya que al parecer comunica con las alcantarillas por las que huireis con todos los caballeros leales prisioneros.
La entrada de la prisión es una gran puerta cerrada, frente a la que dos caballeros con armadura completa, lanza y espada, montan guardia bajo el sol del mediodía.
Horario: Mañana
Lugar: Acuartelamiento de los Caballeros
Los caballeros de la entrada del Acuartelamiento se tragan vuestra historia de la captura del ladronzuelo y de que venís a cobrar la recompensa. De hecho, reconocen a Will y hacen algunas bromas de mal gusto sobre lo que sir Jester hará con el chaval en cuanto se entere de que lo han capturado.
Atravesando la entrada por una pequeña puerta anexa entráis en el cuartel general de los caballeros.
Os encontráis en una gran explanada central que es donde los caballeros deben formar y practicar la doma de caballos. El gran edificio fortificado al otro lado de la explanada debe ser el cuartel general en sí y la residencia de los oficiales de alto rango. Alrededor de la explanada hay más edificios y grandes barracones, aunque vuestro objetivo es un edificio de piedra de una planta situado a vuestra derecha.
Tratais de mantener la calma al ver que hay caballeros por todas partes: haciendo sus quehaceres diarios, patrullas de guardia, entrenamientos a pie o a caballo...
Un caballero que vigila la entrada por el lado interior os indica el bloque prisión y que pidais hablar con el sargento Vernet.
Con esto, empezais a atravesar la explanada paso a paso mientras recordáis lo que Will os dijo sobre ella:
El bloque prisión consta de la planta principal y tres niveles subterráneos. Los caballeros que vais a tratar de liberar se encuentran en el tercer nivel, el mas profundo.
En la planta principal se encuentran las habitaciones del sargento de la prisión, y una sala común y dormitorios de los carceleros (no teneis ni idea de los que puede haber en esa sala o durmiendo en los dormitorios).
Después, cada nivel de los calabozos tiene dos guardias que poseen las llaves de los calabozos de ese nivel, los calabozos en sí y una sala para esos guardias.
Algo que debeis tener muy en cuenta es que cada nivel de la prisión se comunica por unas escaleras bloqueadas por puertas enrejadas cerradas. Las llaves de estas puertas las poseen los guardias del nivel superior. Esto significa que la llave de la reja que comunica el nivel tres con el dos la poseen los guardias del nivel dos, y así sucesivamente. Esta es una medida de seguridad para que si hubiera una fuga los presos no pudieran acceder a los niveles superiores.
Por último, la ruta de escape. Se trata de una letrina que hay en el nivel dos de la prisión. Esto a vosotros no os convence demasiado, pero Will parece muy seguro de sí mismo, ya que al parecer comunica con las alcantarillas por las que huireis con todos los caballeros leales prisioneros.
La entrada de la prisión es una gran puerta cerrada, frente a la que dos caballeros con armadura completa, lanza y espada, montan guardia bajo el sol del mediodía.
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DRÁGALIN
Dragón Carmesí / Gavilán Temerario
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Estáis preparandoos para salir cuando uno de los niños de la banda de Will entra corriendo.
¡Los caballeros ya están saliendo!
¡Maldita sea! Ruge Lucius. Demasiado pronto, el funeral todavía no debe haber acabado. ¡Rapido! ¡Todo el mundo a sus puestos! ¡Ya sabéis lo que hay que hacer! ¡Suerte!
Y así, en sólo unos pocos minutos os encontráis en la calle donde emboscaréis a los caballeros, tratando de no llamar la atención, mientras repasáis mentalmente el plan:
Los carros ya están situados; uno en mitad de la calle que lo cruzarán para bloquear el paso cuando llegue la escolta y otro que les bloqueará después por detrás.
Lucius y Tresmond, armados con arco y flechas deben estar ocultos en los tejados de los edificios colindantes.
Los banda de Will estará por todas partes, una docena de muchachos que se encargará de distraer a los caballeros atacándoles con piedras y se ocuparán de tener despejado vuestro camino a tavés de las casas hasta la calle paralela, donde habrán abierto ya el acceso a las alcantarillas.
En estos últimos momentos os sentís extrañamente tranquilos... la calma que precede a la tormenta.
Y entonces los ois, los cascos de los caballos.
Ya vienen...
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Estáis preparandoos para salir cuando uno de los niños de la banda de Will entra corriendo.
¡Los caballeros ya están saliendo!
¡Maldita sea! Ruge Lucius. Demasiado pronto, el funeral todavía no debe haber acabado. ¡Rapido! ¡Todo el mundo a sus puestos! ¡Ya sabéis lo que hay que hacer! ¡Suerte!
Y así, en sólo unos pocos minutos os encontráis en la calle donde emboscaréis a los caballeros, tratando de no llamar la atención, mientras repasáis mentalmente el plan:
Los carros ya están situados; uno en mitad de la calle que lo cruzarán para bloquear el paso cuando llegue la escolta y otro que les bloqueará después por detrás.
Lucius y Tresmond, armados con arco y flechas deben estar ocultos en los tejados de los edificios colindantes.
Los banda de Will estará por todas partes, una docena de muchachos que se encargará de distraer a los caballeros atacándoles con piedras y se ocuparán de tener despejado vuestro camino a tavés de las casas hasta la calle paralela, donde habrán abierto ya el acceso a las alcantarillas.
En estos últimos momentos os sentís extrañamente tranquilos... la calma que precede a la tormenta.
Y entonces los ois, los cascos de los caballos.
Ya vienen...
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DRÁGALIN
Cuervo Vigía / Gato Alado
Horario: Mañana
Lugar: Acuartelamiento de los Caballeros / Bloque Prisión
Los caballeros oyen vuestra historia extrañados de ver a guardias de la ciudad en el Acuartelamiento, pero parece que no tienen ninguna gana de tratar con vosotros, con lo que os permiten pasar. Abren la puerta y os hacen pasar, aunque uno de los caballeros de la entrada pasa con vosotros y cierra detrás vuestro.
Os encontráis en un pasillo ancho que es la entada de la prisión.
Al frente hay una puerta de rejas cerrada que da a unas escaleras que descienden (al primer nivel subterráneo).
A la izquierda una puerta normal que debe dar a las habitaciones del sargento y a la derecha otra puerta que debe dar a las sala común de los guardias y a sus dormitorios.
Detrás vuestro, la puerta que acabais de atravesar, de la que os dáis cuenta que se puede bloquear desde dentro usando un pesado travesaño de madera.
Os deteneis con Will y el caballero que ha entrado con vosotros. En el pasillo hay otro guardia (con armadura de cuero y espada) que le pregunta con mal genio al caballero que va con vosotros:
¿Qué es esto? ¿Quién es esta gente?
El caballero, temiendo haberse metido en un lío, balbucea:
Son... son unos guardias de la ciudad que han atrapado a un prófugo por el que se ofrece recompensa...
El guardia os mira con suspicacia y vuelve a hablar al caballero: No deberías haberlos dejado pasar... Esperad aquí, tengo que informar al sargento Vernet.
Y dicho esto se mete por la puerta de la izquierda, dejándoos sólos con el caballero, que no se puede ni imaginar lo que está a punto de ocurrir...
Horario: Mañana
Lugar: Acuartelamiento de los Caballeros / Bloque Prisión
Los caballeros oyen vuestra historia extrañados de ver a guardias de la ciudad en el Acuartelamiento, pero parece que no tienen ninguna gana de tratar con vosotros, con lo que os permiten pasar. Abren la puerta y os hacen pasar, aunque uno de los caballeros de la entrada pasa con vosotros y cierra detrás vuestro.
Os encontráis en un pasillo ancho que es la entada de la prisión.
Al frente hay una puerta de rejas cerrada que da a unas escaleras que descienden (al primer nivel subterráneo).
A la izquierda una puerta normal que debe dar a las habitaciones del sargento y a la derecha otra puerta que debe dar a las sala común de los guardias y a sus dormitorios.
Detrás vuestro, la puerta que acabais de atravesar, de la que os dáis cuenta que se puede bloquear desde dentro usando un pesado travesaño de madera.
Os deteneis con Will y el caballero que ha entrado con vosotros. En el pasillo hay otro guardia (con armadura de cuero y espada) que le pregunta con mal genio al caballero que va con vosotros:
¿Qué es esto? ¿Quién es esta gente?
El caballero, temiendo haberse metido en un lío, balbucea:
Son... son unos guardias de la ciudad que han atrapado a un prófugo por el que se ofrece recompensa...
El guardia os mira con suspicacia y vuelve a hablar al caballero: No deberías haberlos dejado pasar... Esperad aquí, tengo que informar al sargento Vernet.
Y dicho esto se mete por la puerta de la izquierda, dejándoos sólos con el caballero, que no se puede ni imaginar lo que está a punto de ocurrir...
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DRÁGALIN
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Horario: Mañana
Lugar: La Mano/ Torre del Barón
Sentado en un mullido sillón, junto a la cama en la que su hermana yace, Dan dormita suavemente. En su regazo reposa un gran libro que ha estado leyendo sobre los linajes de Sommerlund.
Entonces, un sonido le hace despertarse. Con un sobresalto, Dan se da cuenta de que es Irina la que le ha hablado. De un salto baja del sillón, haciendo que el libro caiga al suelo, y se acerca a la cabecera de la cama.
¡Irina! ¡Estás despierta! Solloza el chico mientras aprieta la mano de su hermana, que le mira con debilidad a través de los párpados entreabiertos.
Dan... Escuchame... Nuestro padre...
¡Irina! Dice Dan con lágrimas corriendóle por las mejillas al pensar que ella todavía no sabe nada del trágico destino de Aladar.
No se donde está papá, Irina. Estamos encerrados en esta Torre, los arcabuceros no me dejan salir y además...
Dan escucha... murmura con debilidad Irina. Dragón... los Señores del Kai...
¿Qué? Le dice su hermano. ¡No están aquí! ¡Escucha, tienes que saber todo lo que ha pasado!
No... ellos deben saberlo... antes de que sea tarde... se han equivocado. La voz de la muchacha se hace cada vez más y más débil, mientras se sumerje de nuevo en el sueño.
En peligro... todos....
Horario: Mañana
Lugar: La Mano/ Torre del Barón
Sentado en un mullido sillón, junto a la cama en la que su hermana yace, Dan dormita suavemente. En su regazo reposa un gran libro que ha estado leyendo sobre los linajes de Sommerlund.
Entonces, un sonido le hace despertarse. Con un sobresalto, Dan se da cuenta de que es Irina la que le ha hablado. De un salto baja del sillón, haciendo que el libro caiga al suelo, y se acerca a la cabecera de la cama.
¡Irina! ¡Estás despierta! Solloza el chico mientras aprieta la mano de su hermana, que le mira con debilidad a través de los párpados entreabiertos.
Dan... Escuchame... Nuestro padre...
¡Irina! Dice Dan con lágrimas corriendóle por las mejillas al pensar que ella todavía no sabe nada del trágico destino de Aladar.
No se donde está papá, Irina. Estamos encerrados en esta Torre, los arcabuceros no me dejan salir y además...
Dan escucha... murmura con debilidad Irina. Dragón... los Señores del Kai...
¿Qué? Le dice su hermano. ¡No están aquí! ¡Escucha, tienes que saber todo lo que ha pasado!
No... ellos deben saberlo... antes de que sea tarde... se han equivocado. La voz de la muchacha se hace cada vez más y más débil, mientras se sumerje de nuevo en el sueño.
En peligro... todos....
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DRÁGALIN
Dragón Carmesí / Gavilán Temerario
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Apostados en vuestros escondrijos, soportáis la tensión de la espera mientras veis cómo la escolta de caballeros montados pasan a escasos metros vuestros.
Ois cómo uno de los dos caballeros que abre la marcha da el alto al encontrarse con el carromato que bloquea la estrecha calle y exige que le abran paso en nombre del Barón, y es en ese momento cuando se oye un estrépito desde el lado opuesto cuando otro carromato tirado por dos bueyes desbocados se lanza contra la escolta por detrás.
Los caballeros de la retaguardia hacen avanzar con destreza a sus monturas para evitar el carromato, que vuelca de lado sobre el suelo. La escolta se encuentra de esa manera apiñada en un corto trecho de la calle. Es vuestro momento de actuar. Saliendo a toda velocidad llevando a Cortavientos y a Fuego, os lanzáis contra el grupo de caballeros.
Por encima de las maldiciones de los jinetes y de los relinchos, se oye la poderosa voz de sir Jester Crow, ordenando desenvainar a sus hombres. Mientras las espadas sisean al salir de sus vainas, Gavilán concentra su concentración en el comandante de los caballeros, en un ataque psíquico dirigido a dejarlo sin sentido. Pero para su sorpresa, la mente de Crow parece estar protegida de alguna manera, con lo que no logra su objetivo.
Por su parte, Dragón se prepara para desatar toda su energía psíquica en un devastador ataque. El joven Señor del Kai sabe que sólo afectará a todos los jinetes si se situa justo en el centro de ellos, con lo que, al mismo tiempo que blande el espadón llamado Fuego, se mete de cabeza en la vorágine de caballos y jinetes, en lo que parece, visto desde fuera, un ataque totalmente suicida.
Gavilán siente la terrible descarga psíquica y observa atónito cómo se derrumban todos los caballos, junto con los caballeros, la mayoría de ellos inconscientes, y otros llevandose las manos a la cabeza y aullando de dolor. ¿Lo habrá conseguido Dragón?
No del todo. Entre los caballos caidos se alza sir Jester Crow, cubierto de arriba abajo con una elaborada armadura, se protege el costado con un robusto escudo con el emblema de Ruanon y os apunta con una espada con la hoja cubierta de runas que emiten un halo fantasmal.
La voz de Crow suena metálica desde el interio de su yelmo:
Debí encargarme de vosotros el primer día que pisásteis Ruanon... Ahora repararé ese error...
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Apostados en vuestros escondrijos, soportáis la tensión de la espera mientras veis cómo la escolta de caballeros montados pasan a escasos metros vuestros.
Ois cómo uno de los dos caballeros que abre la marcha da el alto al encontrarse con el carromato que bloquea la estrecha calle y exige que le abran paso en nombre del Barón, y es en ese momento cuando se oye un estrépito desde el lado opuesto cuando otro carromato tirado por dos bueyes desbocados se lanza contra la escolta por detrás.
Los caballeros de la retaguardia hacen avanzar con destreza a sus monturas para evitar el carromato, que vuelca de lado sobre el suelo. La escolta se encuentra de esa manera apiñada en un corto trecho de la calle. Es vuestro momento de actuar. Saliendo a toda velocidad llevando a Cortavientos y a Fuego, os lanzáis contra el grupo de caballeros.
Por encima de las maldiciones de los jinetes y de los relinchos, se oye la poderosa voz de sir Jester Crow, ordenando desenvainar a sus hombres. Mientras las espadas sisean al salir de sus vainas, Gavilán concentra su concentración en el comandante de los caballeros, en un ataque psíquico dirigido a dejarlo sin sentido. Pero para su sorpresa, la mente de Crow parece estar protegida de alguna manera, con lo que no logra su objetivo.
Por su parte, Dragón se prepara para desatar toda su energía psíquica en un devastador ataque. El joven Señor del Kai sabe que sólo afectará a todos los jinetes si se situa justo en el centro de ellos, con lo que, al mismo tiempo que blande el espadón llamado Fuego, se mete de cabeza en la vorágine de caballos y jinetes, en lo que parece, visto desde fuera, un ataque totalmente suicida.
Gavilán siente la terrible descarga psíquica y observa atónito cómo se derrumban todos los caballos, junto con los caballeros, la mayoría de ellos inconscientes, y otros llevandose las manos a la cabeza y aullando de dolor. ¿Lo habrá conseguido Dragón?
No del todo. Entre los caballos caidos se alza sir Jester Crow, cubierto de arriba abajo con una elaborada armadura, se protege el costado con un robusto escudo con el emblema de Ruanon y os apunta con una espada con la hoja cubierta de runas que emiten un halo fantasmal.
La voz de Crow suena metálica desde el interio de su yelmo:
Debí encargarme de vosotros el primer día que pisásteis Ruanon... Ahora repararé ese error...
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DRÁGALIN
Cuervo Vigía / Gato Alado
Horario: Mañana
Lugar: Acuartelamiento de los Caballeros / Bloque Prisión
Tratáis de mantener la sangre fría mientras esperáis que el guardía vuelva con el sargento del bloque prisión. A vuestro lado, el caballero suspira, inadvertido de quiénes sois en realidad.
Cuervo cruza una mirada con Will, que asiente con la cabeza. El chaval está listo para actuar, y observa como el chico dirige su mirada a la puerta de entrada. El señor del Kai puede adivinar las intenciones del muchacho: si la cosa se lía, se dirigirá a la entrada, para cerrarla y colocar el travesaño que impedirá a cualquiera entrar en el edificio.
Mientras, Gato oye un ruido procedente de la puerta de la derecha, de la sala común de los guardias. Parecen dos voces, de manera que en esa sala hay al menos dos guardias más. Gato no puede evitar preguntarse si estarán armados o no.
Y en ese momento, se abre la puerta de la izquierda, apareciendo el guardia que os ha recibido seguido de un hombre gordo con armadura de cuero y capa que os mira ceñudo. Debe ser el sargento Vernet, el encargado del bloque-prisión.
Observáis con preocupación cómo, además de una espada corta, el sargento lleva en su cintura un pistolón en su funda.
El recién llegado os grita a la cara: ¡¿Pero qué clase de guardias sois vosotros que no conoceis ni vuestras propias normas?! ¡¿Acaso no sabéis que las recompensas sólo las pueden reclamar oficiales de alto rango de la guardia y no escoria pateacalles como vosotros?!
Con la cara roja, Vernet os señala con el dedo: ¡Sabed que esta es la peor idea que habéis tenido en vuestra vida! ¡Nosotros nos haremos cargo del ladronzuelo y vosotros volveréis a las calles que es donde tenéis que estar! ¡Y sin ver ni una sóla moneda! ¡Ah, y si os atrevéis a abrir la boca os juro que pasaréis el próximo mes encarcelados, a pan y agua!
Horario: Mañana
Lugar: Acuartelamiento de los Caballeros / Bloque Prisión
Tratáis de mantener la sangre fría mientras esperáis que el guardía vuelva con el sargento del bloque prisión. A vuestro lado, el caballero suspira, inadvertido de quiénes sois en realidad.
Cuervo cruza una mirada con Will, que asiente con la cabeza. El chaval está listo para actuar, y observa como el chico dirige su mirada a la puerta de entrada. El señor del Kai puede adivinar las intenciones del muchacho: si la cosa se lía, se dirigirá a la entrada, para cerrarla y colocar el travesaño que impedirá a cualquiera entrar en el edificio.
Mientras, Gato oye un ruido procedente de la puerta de la derecha, de la sala común de los guardias. Parecen dos voces, de manera que en esa sala hay al menos dos guardias más. Gato no puede evitar preguntarse si estarán armados o no.
Y en ese momento, se abre la puerta de la izquierda, apareciendo el guardia que os ha recibido seguido de un hombre gordo con armadura de cuero y capa que os mira ceñudo. Debe ser el sargento Vernet, el encargado del bloque-prisión.
Observáis con preocupación cómo, además de una espada corta, el sargento lleva en su cintura un pistolón en su funda.
El recién llegado os grita a la cara: ¡¿Pero qué clase de guardias sois vosotros que no conoceis ni vuestras propias normas?! ¡¿Acaso no sabéis que las recompensas sólo las pueden reclamar oficiales de alto rango de la guardia y no escoria pateacalles como vosotros?!
Con la cara roja, Vernet os señala con el dedo: ¡Sabed que esta es la peor idea que habéis tenido en vuestra vida! ¡Nosotros nos haremos cargo del ladronzuelo y vosotros volveréis a las calles que es donde tenéis que estar! ¡Y sin ver ni una sóla moneda! ¡Ah, y si os atrevéis a abrir la boca os juro que pasaréis el próximo mes encarcelados, a pan y agua!
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DRÁGALIN
Dragón Carmesí / Gavilán Temerario
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Los señores del Kai tienen la reputación de ser los mejores guerreros de Magnamund, y esto no es por casualidad. Estocada a estocada, rápidos como una cobra atacando, hacéis retroceder a sir Jester hasta que acaba con la espalda contra la pared de un edificio, con la armadura llena de abolladuras y arañazos. Los ataques del caballero son burdos para vosotros, y cada vez más lentos, lo cual aprovecha Dragón para, con un mandoble de Fuego, arrancarle el escudo del brazo a Sir Jester. Gavilán temina la lucha colocándole la punta de su lanza Cortavientos en el protector de la garganta.
Desde el interior del yelmo se oye un gruñido, y sir Jester deja caer su espada al suelo, mientras balbucea: Me rindo...
Rápidamente, mientras Gavilán vigila al caballero, Dragón le quita el yelmo y, usando la propia daga de Crow, le empieza a despojar del pesado peto de su armadura. Cuando este cae al suelo, descubre algo que ya había visto en otra ocasión: Sir Jester lleva al cuello un colgante con el símbolo de un ojo cerrado, el mismo que llevaba el Maestro Dragair. Es muy posible que sea esta la explicación de la inmunidad que tenía a vuestro Ataque Psíquico.
De esta manera, a punta de lanza, lleváis a sir Jester a través de una de las casas colindantes, siguiendo el camino que os abren los muchachos de la banda de Will. A vuestras espaldas, la calle de la emboscada se empieza a llenar de curiosos y gritos de alarma llamando a la guardia se escuchan por doquier. No tenéis mucho tiempo.
Salís de la casa por una puerta trasera a la calle paralela y veis a Tresmond que, acompañado por algunos chicos, os hace señas para que os acerquéis. Llevando a vuestro cautivo llegáis hasta la entrada de una alcantarilla que el bardo tiene abierta y por la que os hace descender.
Minutos más tarde os encontráis siguiendo a Tresmond ( y a su antorcha ) por las hediondas alcantarillas de la ciudad, con sir Jester ente vosotros, ratas correteando por las paredes y sumergidos hasta casi la cintura en una corriente viscosa que para vuestra desgracia no es agua.
Lo único que os anima es saber que aunque los caballeros de Ruanon y la guardia de la ciudad van a ponerse como locos con lo que acabais de hacer, de momento la ventaja es vuestra. Sir Jester está en vuestro poder y pronto va a tener una animada charla con vosotros...
Horario: Mañana
Lugar: Ciudad de Ruanon / Barrio Viejo
Los señores del Kai tienen la reputación de ser los mejores guerreros de Magnamund, y esto no es por casualidad. Estocada a estocada, rápidos como una cobra atacando, hacéis retroceder a sir Jester hasta que acaba con la espalda contra la pared de un edificio, con la armadura llena de abolladuras y arañazos. Los ataques del caballero son burdos para vosotros, y cada vez más lentos, lo cual aprovecha Dragón para, con un mandoble de Fuego, arrancarle el escudo del brazo a Sir Jester. Gavilán temina la lucha colocándole la punta de su lanza Cortavientos en el protector de la garganta.
Desde el interior del yelmo se oye un gruñido, y sir Jester deja caer su espada al suelo, mientras balbucea: Me rindo...
Rápidamente, mientras Gavilán vigila al caballero, Dragón le quita el yelmo y, usando la propia daga de Crow, le empieza a despojar del pesado peto de su armadura. Cuando este cae al suelo, descubre algo que ya había visto en otra ocasión: Sir Jester lleva al cuello un colgante con el símbolo de un ojo cerrado, el mismo que llevaba el Maestro Dragair. Es muy posible que sea esta la explicación de la inmunidad que tenía a vuestro Ataque Psíquico.
De esta manera, a punta de lanza, lleváis a sir Jester a través de una de las casas colindantes, siguiendo el camino que os abren los muchachos de la banda de Will. A vuestras espaldas, la calle de la emboscada se empieza a llenar de curiosos y gritos de alarma llamando a la guardia se escuchan por doquier. No tenéis mucho tiempo.
Salís de la casa por una puerta trasera a la calle paralela y veis a Tresmond que, acompañado por algunos chicos, os hace señas para que os acerquéis. Llevando a vuestro cautivo llegáis hasta la entrada de una alcantarilla que el bardo tiene abierta y por la que os hace descender.
Minutos más tarde os encontráis siguiendo a Tresmond ( y a su antorcha ) por las hediondas alcantarillas de la ciudad, con sir Jester ente vosotros, ratas correteando por las paredes y sumergidos hasta casi la cintura en una corriente viscosa que para vuestra desgracia no es agua.
Lo único que os anima es saber que aunque los caballeros de Ruanon y la guardia de la ciudad van a ponerse como locos con lo que acabais de hacer, de momento la ventaja es vuestra. Sir Jester está en vuestro poder y pronto va a tener una animada charla con vosotros...
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Fantasma Grunweazel
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DRÁGALIN
Cuervo Vigía / Gato Alado
Horario: Tarde
Lugar: Acuartelamiento de los Caballeros / Bloque Prisión
Will se mueve a toda velocidad hacia atrás, en dirección a la entrada, al mismo tiempo que Gato Alado desata su energía mental de forma brutal, haciendo que Vernet y los dos caballeros caigan al suelo inconscientes.
Cuervo se deshace de la capa de guardia y saca a Inquisidora mientras se asegura que los tres están inconscientes y que no van a despertar en un buen rato. Gato se hace a un lado mientras observa la puerta de la derecha, que lleva a la sala común. ¿Habrán oido los guardias cómo se derrumbaban estos tres? Por el momento parece que no, su sexto sentido no le advierte de ningún peligro.
Entretanto, Will ha cerrado la puerta de la entrada y ha colocado el travesaño para evitar que nadie pueda entrar desde el exterior... pero esto ha debido alertar al caballero que quedaba fuera, al que ois como empieza a golpear la puerta con el puño y a gritar desde detrás de la pesada puerta: ¡Eh! ¿Qué ocurre? ¿Por qué habéis cerrado?
Os miráis entre vosotros. Y ahora ¿qué?
Horario: Tarde
Lugar: Acuartelamiento de los Caballeros / Bloque Prisión
Will se mueve a toda velocidad hacia atrás, en dirección a la entrada, al mismo tiempo que Gato Alado desata su energía mental de forma brutal, haciendo que Vernet y los dos caballeros caigan al suelo inconscientes.
Cuervo se deshace de la capa de guardia y saca a Inquisidora mientras se asegura que los tres están inconscientes y que no van a despertar en un buen rato. Gato se hace a un lado mientras observa la puerta de la derecha, que lleva a la sala común. ¿Habrán oido los guardias cómo se derrumbaban estos tres? Por el momento parece que no, su sexto sentido no le advierte de ningún peligro.
Entretanto, Will ha cerrado la puerta de la entrada y ha colocado el travesaño para evitar que nadie pueda entrar desde el exterior... pero esto ha debido alertar al caballero que quedaba fuera, al que ois como empieza a golpear la puerta con el puño y a gritar desde detrás de la pesada puerta: ¡Eh! ¿Qué ocurre? ¿Por qué habéis cerrado?
Os miráis entre vosotros. Y ahora ¿qué?